lunes, 16 de junio de 2014

Escapismo


Se trata del arte del escape, evadir las trampas y los encierros físicos. Los artistas del escape o escapistas se liberan de esposas, jaulas, cadenas, camisas de fuerza, cajones de acero, barriles, tanques de agua y hasta de edificios en llamas. No existe una rutina predeterminada, cada mago se encarga de desarrollar sus propios números y de variar los elementos del escape. Las técnicas de ilusionismo suelen ayudar a los escapistas a lograr sus hazañas y en otros casos practican verdaderos despliegues de flexibilidad, ingenio y fuerza.

Origen

En sus inicios, el escapismo no era una práctica de show, es decir, no era un acto abierto al público como se lo conoce hoy en día, sino que los antiguos magos usaban su habilidad de escape para generar ilusiones tales como la transmutación o las famosas desapariciones de objetos o personas.
Los primeros magos en popularizar el escapismo como un show de magia en si mismo fueron los hermanos Davenport, hacia el año 1560, quienes realizaban un numero en donde se liberaban a si mismos de los nudos de la soga que los sujetaba.
Otros magos comenzaron a recrear el truco de los hermanos Davenport con el fin de desacreditarlos, puesto que los hermanos afirmaban que se trataba de un trabajo de capacidad física y no ilusoria, aunque estas desacreditaciones no mostraban el escape al publico sino que solo se limitaban a replicarlo y explicar que se trataba de habilidades secretas de los magos.

-Presentación de uno de los escapes más famosos de H. Houdini-

Recien en el 1590 el escapismo comenzó a ser presentado como un acto en si mismo, diferenciado de las ilusiones de los magos tradicionales. Pero recién en la década de 1890 el escapismo alcanzó fama y reconocimiento internacional gracias a los espectáculos de Harry Houdini, quien se encargó de exponer una gran variedad de escapes de todo tipo de situaciones complejas y difíciles ataduras.
Houdini no solo se limito a la habilidad física para sus escapes sino que también se valió de muchas puestas en escena y trucos que agregaban mucha intriga a sus presentaciones, llegando a usar incluso accesorios diseñados especialmente para la ocasión. Este gran escapista brindó un gran aporte al escapismo como una disciplina en sí, definiendo su repertorio básico de escapes con esposas, candados, camisas de fuerza y jaulas.

Pese al largo desarrollo de esta práctica, el termino "escapismo" fue acuñado por un mago contemporáneo a Houdini, el escapista australiano Norman Murray Walters. Actualmente los escapistas a agregado nuevos números y escapes novedosos con herramientas insólitas, como la sierra de David Copperfield, entre otros; pero los números de Houdini siguen siendo los básicos obligados de todo escapista que se precie, he incluso existen nuevos números que sus trucos a métodos más modernos.


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